Petit suisse casero light

1. Pon a remojar en agua las dos hojas de gelatina.
2. Lava y pica las fresas.
3. Bate el requesón, el yogur y las fresas con la batidora.
4. Calienta en un cazo o en el microondas los 50ml de leche, y cuando esté caliente, añade las hojas de gelatina escurridas.
5. Revuelve bien hasta que las gelatinas se disuelvan completamente, y añádelo a la mezcla de requesón, yogur y fresas.
6. Agrega un poquito de edulcorante líquido y mezcla con la batidora.
7. Vierte la mezcla en vasitos individuales de cristal, y deja reposar en la nevera unas tres horas aproximadamente.
8. Pasadas las tres horas, ya se habrá endurecido y estará listo para comer.

    «Siempre queda un hueco para el postre…» Y es que, uno no termina de comer hasta que no se acaba el postre, por eso, si queremos mantener la línea, es importante que este sea saludable y que no se exceda en calorías, y mi receta de hoy cumple esas expectativas.

Este Petit Suisse casero light es perfecto para después de comer, pues es muy saciante, gracias a su aporte en proteínas, y tiene ese toque dulce con el que tanto nos gusta acabar una comida. No lleva grasas, y su aporte de carbohidratos procede de las fresas, una fruta muy rica en antioxidantes. Una ración sólo aporta unas 60kcal, y es perfecto para niños y mayores.

No dejes de comer tu postre por miedo a engordar, elige opciones más saludables como esta Panna Cotta de chocolate light, o este Helado de frambuesas light, que además es bajo en carbohidratos.